El tiempo en realidad no existe, es algo que invento el hombre, basándose en la claridad del día y la obscuridad de la noche, entonces empezó a contar las veces con luz de sol y las de oscuridad. Más adelante, descubrió que la tierra era redonda, y que giraba, y se dio cuenta que esos giros producen el día y la noche a un giro le llamó día y lo partió en 24 pedazos y los llamó hora a cada uno y cada hora la dividió en 60 y cada bloque le llamó minuto y no conforme, al minuto lo volvió a dividir entre 60 y le llamó segundo. A todo esta matemática le llamamos tiempo.

Desde antes de que nazcamos, nuestros padres miden el tiempo que nos tomará nacer y al nacer, el Dr. anota la hora en que dimos nuestra primera bocanada de aire en este mundo y desde entonces, estamos condenados a vivir con base en ese tiempo.

Algunos sabios, viven inteligentemente cada segundo, minuto, hora y días que se convierten en semanas, meses y años.

Ya lo dice claramente el poema del escritor y poeta Don Renato Leduc; “Sabia virtud de conocer el tiempo, a tiempo amar, como dice el refrán dar tiempo al tiempo, pues de amor y dolor alivia el tiempo.”

Cuando somos jóvenes, somos inconformes porque se nos niegan o prohíben muchas cosas y queremos que el tiempo avance rápido para ser adultos y poder hacerlas. Pero cuando somos adultos, entonces, queremos ser nuevamente jóvenes para volver a tener vigor, fuerza, agilidad (física y mental) atracción, etc. en fin, que nunca estamos a gusto con el tiempo.

Y si somos necios, se nos va. Y claro que somos necios porque en ese acomodo temporal que buscamos, perdemos lo más valioso; que no es el tiempo, sino la propia vida.

Si somos jóvenes hablamos en futuro; “cuando yo sea, cuando viaje, cuando termine…, cuando pueda haré”. Se quiere ser grande para hacer lo prohibido, pero no se quiere crecer para asumir responsabilidades, ahí es más fácil mostrarnos vulnerables ante los demás y que nos den todo lo que cubra nuestras necesidades. Hay un chiste por ahí de un merolico que en su discurso al público dice; Los perros cuando son cachorros, abren los ojos a los 12 ó 15 días, los gatos en 3 semanas, pero ustedes, los humanos ¿Cuándo demonios abrirán los ojos? y se darán cuenta lo tarugos que son y como se aprovechan de ustedes. JaJaJaJa Juventud divino tesoro, tofo quieren, rápido, bueno, bonito y sin el menor esfuerzo.

Y de viejos, vivimos en el pasado, si nos fue bien, mejor dicho, si fuimos responsables y cuidamos de nosotros mismos diremos, ¡uy! Cuando era joven a tu edad (hacía los hijos o jóvenes) yo ya había hecho esto o lo otro, o diremos a la gente en general; yo fui capitán del ejército, profesionista en… y el mundo casi casi giraba porque yo le daba vueltas.

Pero si no fuimos responsables de nosotros, entonces vivimos quejándonos; es que yo no tengo éxito porque vengo no dé abajo, sino de lo que sigue, de los sótanos de la sociedad, mis padres no me querían o no tenían tiempo ni dinero para quererme, luego crecí como una enredadera a lo tonto y solito y con mucha mala suerte.

Siempre he trabajado y los demás se aprovechan de mi y me roban mis ideas, mi trabajo, nadie me respeta, este mundo es una porquería y por más que le busco no hay salida. Pero Dios sabe que no es culpa mía sino de aquellos ???? que no me quieren. que me tienen envidia y que sólo quieren fastidiarme (honestamente ¿alguien puede envidiar esto?).

Al señalar así, no nos damos cuenta que con el dedo índice ???? hacia el frente condenamos a otros, pero no nos damos cuenta, a quien apuntan el resto de nuestros dedos, pues nada más ni menos que al verdadero responsable, uno mismo.

Dios nos hizo casi perfectos, quizá con inteligencia para modificar la materia del mundo y hacerlo más fácil para sobrevivir, pero jamás con esa inteligencia podremos cambiar a los demás, el único que puede cambiar es uno mismo, así que no te creas Dios y sigas señalando a los demás.

¿Quieres otra vida, otro destino?, pues piensa, estudia la forma, práctica y déjate de tonterías. Levántate temprano no pensando que vas a desayunar, sino cómo te vas a ganar el desayuno, ponle amor, empeño a lo qué haces y disfruta dosificadamente de lo que coseches.

Agradece a quien quieras, Dios, naturaleza o la vida misma, el hecho que puedes respirar, que ves, caminas te mueves y piensas.

Si tienes familia, pues comunícate con ellos, pero por favor, no hables de chismes, problemas, muertes, malas noticias, críticas y lo principal prohibido quejarse, sólo queda actuar, actuar y seguir actuando pero con positividad (No falso optimismo) basada en la realidad. No te crees expectativas (sueños guajiros) pero si ponte metas a corto plazo.

Hazlo por 21 días, habrás adquirido el hábito y tu vida cambiará drásticamente, si continúas haciendo lo mismo ¿porque el resultado será diferente? Obviamente no.

Así que ¿cuanto tiempo? requieres:
Para seguirte quejando.
Para culpar a los demás
Para justificarse
Para pobretearte
Para sentir lástima por ti.
Para que te sigas faltando el respeto
Para que uses la mente en venganzas
Para creer que la solución es que cambien los demás.
O
Para que dejes de hablar del pasado, que ya no existe (sólo en tu mente)
Para que te valores hoy.
Para obligar a tu mente a pensar otra cosa diferente
Para amarte sin auto lastima
Para aceptar lo que ya tienes
Para iniciar un plan de futuro
Para disfrutar el sol que té calienta y el viento que te refresca.
Para dejar de tener miedo
Para entender que ya no eres un niño sino un hombre, un adulto.
Para enfrentar la vida como se te presenta.
Para tomar tus propias decisiones y no seguir la de los demás.
Para ser el dueño de tu vida y no el gato (emocionalmente) de la vida de los demás.
Para comprender que no eres sólo tú, te llevas entre las patas a los demás.
Para que te des cuenta que tu comportamiento es el que tus hijos están copiando.

Tú decides, en cuanto tiempo. O mejor no hagas nada. ????